Quién no conoce a Los Secretos. Es uno de los grupos más representativos de la música española. Llevan 41 años en el negocio y continúan con el mismo entusiasmo que el primer día. Su amor por la música y sus ganas de hacer que siga tocando nuestros corazones se ha visto claramente en el modo en el que han afrontando sus conciertos durante la pandemia. Junto a todas la medidas de seguridad posibles, la calidad de su sonido no ha descendido un ápice y han conseguido ser un bálsamo para muchas personas en estos tiempos tan inciertos.
Llevan 41 años en la música y continúan con el mismo entusiasmo que el primer día
El día 24 de junio tendremos la oportunidad de escucharlos en Boadilla, dentro del ciclo Las Veladas del Palacio, y seguro que no nos dejan indiferentes.
Para ir abriendo boca, nos pusimos en contacto con el cantante del grupo, Álvaro Urquijo (1962), que nos habló sobre su último disco, Mi paraíso, y cómo han vivido la dura realidad de los últimos meses.
¿Por qué se llama Mi paraíso?Tiene dos significados. Por un lado, en el disco hay una especie de canción protesta con ese nombre, criticando lo que estamos haciendo con nuestro planeta (nuestro paraíso), que las cosas cada vez van a peor. Yo soy bastante ecologista, aunque apolítico, y hace 22 años ya estaba muy concienciado con esto. De hecho, con lo que he ganado con mi trabajo, he ido transformando mi casa para que fuera sostenible, cero emisiones.
Por otro, varios de nosotros componemos los temas del disco y se ve que estamos en nuestro mejor momento como músicos, como grupo, y eso es un paraíso para nosotros, que podemos tocar lo que queremos y como queremos.
¿Tuvisteis que interrumpir la promoción del nuevo álbum?Sí, sacamos el disco justo antes de que estallara la pandemia y no nos parecía el momento de presentar un nuevo disco. Cuando ya se pudo volver a los escenarios, aunque con muchas limitaciones, cambiamos nuestro modo de pensar y empezamos a buscar especialmente que la gente se divirtiera y no tanto hacer promoción.
"Cine, teatro, música, etc no solo entretienen, también reducen un poco la ansiedad de estos momentos"
Elegimos solo unos pocos temas del álbum nuevo e hicimos un tipo de show más íntimo, semiacústico-eléctrico, que ha gustado mucho. Así hemos hecho 32 conciertos. ¡Hemos sido afortunados!Empezamos con la cesión de la canción Pero a tu lado a beneficio de Cruz Roja en su lucha contra las consecuencias de la covid-19. Grabamos un videoclip con 20 artistas de lo más dispares. A partir de ahí, y bajo el paraguas de las medidas anticovid, volvimos a tocar.
¿Ha cambiado mucho la música en los últimos años?
La digitalización ha hecho desaparecer las listas de éxitos, el concepto de single. El concepto de éxito también se ha transformado. Cuando empezamos nosotros, si eras bueno, vendías. Ahora, si sales mucho en la televisión, se ven mucho tus videos o tienes un montón de seguidores ya eres famoso. Y a veces no se corresponde ese éxito con un buen producto.
Y con la pandemia, ¿están siendo momentos difíciles?
Si antes no llenabas la parte de arriba de un teatro, lo que se conoce como ‘gallinero’, no te salía rentable, imagínate con un tercio del aforo. ¡Una ruina!
Pero estamos muy agradecidos al público que asiste a los conciertos. Lo cierto es que había cierta abstemia cultural. Cine, teatro, música, etc no solo entretienen, también reducen un poco la ansiedad de estos momentos.
"Elegimos solo unos pocos temas del álbum nuevo e hicimos un tipo de show más íntimo"
¿Retomáis con ganas la gira este verano?
En nuestra historia, cuando ha habido algún problema, nuestra actitud ha sido siempre dar un paso hacia delante. Es la misma actitud que cuando sacamos disco en septiembre del año 80 cuando todavía no se hablaba de la Movida.
Nunca hemos sido músicos por dinero, ni por fama, sino porque nos gustaba la música. Poder dedicarnos a lo que nos apasiona es una forma de encarar la vida.
Lo que peor llevo son las mascarillas, no ver la sonrisa del público, esa empatía que se genera en los conciertos.
¿El público lo es todo?
Si estamos aquí después de tanto tiempo es gracias al público, que es soberano y es quien decide lo que le gusta. Vivimos en el corazón de las personas que nos escuchan. Por eso siempre queremos dar lo mejor, no caer en la comodidad. De todas nuestra tragedias, siempre nos ha sacado el cariño del público.