Antes de pasar el coctel en los jardines, se proyectó a los invitados un vídeo con un resumen de lo que ha sido la labor de la asociación desde sus orígenes hasta ahora. Un trabajo basado en la defensa (casi lucha en alguna ocasión) del edificio monumental y su entorno para que fuera rehabilitado y destinado a un fin compatible con el convenio de expropiación de 1998 a su propietario, Enrique Rúspoli, descendiente del infante. Y sobre todo, para que fuera disfrutado por los vecinos de Boadilla del Monte.
También con motivo de este 20 aniversario, hay un exposición en el espacio La pérgola, en los jardines del palacio. Muestra que con imágenes y textos explicativos repasa la historia de la asociación y su trabajo durante estos veinte años.
Gracias a ese trabajo de defensa y divulgación de la historia del edificio más representativo de la Boadilla y sus personajes, el palacio no terminó en manos del Ministerio de Defensa o la SGAE, por ejemplo, y es hoy lo que vemos: un edificio con todo su entorno recuperado, con varias estancias de un interior rehabilitadas y abiertas al público (la capilla, la sala de la música...) y otras en proceso de restauración (la habitación de la condesa y su entorno, la escalera de la segunda torre...).
Un gran cambio a partir de 2011A partir de 2011, el devenir del palacio dio un giro de 180 grados con la llegada al consistorio del equipo de Antonio González Terol. El alcalde de Boadilla del Monte entre 2011 y 2019, consciente del valor del conjunto histórico para Boadilla del Monte y sus habitantes, comenzó un proceso de rehabilitación por fases. Para ello, se trabajó la obtención de recursos económicos a través de distintas vías (fondos europeos, ayudas estatales, de la Comunidad de Madrid o fundaciones privadas) para poder realizar el plan.
El resultado es el que podemos ver hoy. En este tiempo, se ha rehabilitado la explanada, los portones, los muros del recinto, saneado la fachada, restaurado la fuente de Ventura Rodríguez, los jardines, las huertas, el gallinero y, hace unas semanas, se inauguraba lo que faltaba: la noria y el estanque.
Tal y como señalaba Paloma Olmedo, presidenta de la asociación, se ha hecho mucho... pero "queda por terminar la rehabilitación del palacio y darle un uso... público, cultural...". Un trabajo que el alcalde actual, Javier Úbeda, ya ha dicho en distintas ocasiones que tiene intención de hacer.