Educación

Enrique Maestu: “El alumno debe ser el protagonista del proceso de aprendizaje”

El futuro (casi ya presente) en la educación pasa por una enseñanza personalizada con un traje a la medida de cada alumno, y en un sistema en el que el alumno es el protagonista de su propio proceso de aprendizaje.

 

Enrique Maestu, presidente del Círculo de Calidad Educativa (CICAE), la principal asociación de colegios privados de España, y director del Colegio Virgen de Europa (CVE) es un referente en el sector educativo en España.

Hablamos con él por su doble condición de director del CVE y representante de una asociación que integra a 50 centros privados de reconocido prestigio. Entre ellos, varias de nuestro entorno: Mirabal International School,Agora International School, el propio CVE o el Liceo Sorolla en Pozuelo de Alarcón.

Como presidente de CICAE acudió unos días antes de nuestro encuentro a la toma de posesión de la ministra de Educación, Isabel Celaá. Evento en el que la asociación ofreció su apoyo para mejorar la educación en España.

En esta primera toma de contacto con la ministra que sigue en el cargo, se habló de algunos de los temas que se tratarán en esta legislatura: la concertada y la formación profesional. “En CICAE estamos a favor del papel que juega la educación concertada en el sistema educativo español, pero dentro del límite de la ley, que habla de entidades benéfico-docentes sin ánimo de lucro que impartan enseñanza gratuita”, aclara.

Pero a su juicio lo más importante que se dijo en este encuentro es la intención anunciada por Isabel Celaá “de promover el desarrollo de la formación profesional. El futuro de la educación está ahí porque hay un montón de necesidades de contratación que no satisface el mercado”, asegura Maestu.

El CVE lleva varios años apostando por los ciclos formativos (imparten los programas de Técnico superior en enseñanza y animación sociodeportiva TSEAS, y el programa de Técnico en conducción de actividades físico-deportivas en el medio natural TECO).

Acaba de crear, además, un Centro de Formación en Tecnologías Exponenciales (CTEX) en Villanueva del Pardillo. En septiembre empezará a funcionar para impartir cursos específicos realizados a medida de necesidades reales de las empresas.

Apuesta por el BI

El CVE fue pionero también en su apuesta por el modelo del Bachillerato Internacional (BI). El año pasado presentaron 25 alumnos. Este serán 50. “El BI nos permite escaparnos de las rigideces del sistema educativo español. Frente al profesor que da la clase, el alumno que toma apuntes y luego hace un examen; en el BI, el examen como forma de evaluar desaparece. Se evalúa sobre un trabajo de investigación monográfico que debe hacer durante dos años. Un comité externo lo evalúa y, si no lo supera, no aprueba”, comenta.

Entre las ventajas del sistema BI hace hincapié en que “se basa en la independencia del alumno en el sistema de aprendizaje frente a la dependencia del sistema español. El alumno, de ir a remolque, pasa a ir en la cabina de mando y es el protagonista de su aprendizaje. Son personas críticas, creativas, interesadas por el proceso de aprendizaje. Las universidades quieren este tipo de alumno. Pero para ello es necesario cambiar las cosas: el currículo, los métodos de enseñanza y los sistemas de evaluación”, resume. “Si no se cambia esto, no es posible cambiar el sistema”.

No se puede saber todo

“Es imposible saberlo todo. El conocimiento crece a tal velocidad que en vez de ser más sabios somos más ignorantes. Hay que atreverse a hacer un currículo de mínimos, flexible y que permita ser creativos a los profesores. Ya te anticipo que eso es imposible”. Pero, por intentarlo, que no sea.

El CVE ha encontrado en el BI una buena vía para escapar de las rigideces del sistema español y adaptar la formación de sus alumnos a lo que demanda la sociedad y las empresas hoy en día. Un sistema que está implementando en primaria y secundaria y prevé aplicar ya también en infantil.

También se trabaja en una educación más flexible. “Si no todos los alumnos son iguales, ¿por qué formales a todos de la misma manera? A unos se les dan mejor las matemáticas que a otros, la lengua o los idiomas... Si nos dejaran ser más flexibles, haríamos una traje a medida de cada alumno”, afirma.

“El aula debe ser también un taller donde los alumnos colaboran en su proceso de adquisición de conocimientos”, explica.

Tu propia estrategia de mejora

Con el alumno como protagonista, “la evaluación es un proceso de tutoría en donde el alumno pacta, conjuntamente con el profesor y sus padres, estrategias para mejorar. Él es el protagonista de su mejora personal”, señala. Una innovación que han introducido en el colegio que “está gustando mucho a las familias y que está mejorando la actitud de los chicos”. Este protagonismo del alumno es una de las bases de la renovación que experimenta el colegio en su nuevo proyecto de dirección, que aplica desde hace un año.

Su modelo pedagógico es un referente en el panorama educativo español y está siendo aplicado por algunos centros en otros países. “Estar en CICAE nos ha permitido a todos los miembros aprender unos de otros. También salimos mucho a otros países que lo están haciendo bien a ver qué hacen otros colegios. A todos nos une ser centros de calidad”, concluye.

 

NUEVO PROYECTO CVE

El CVE se embarcó hace un año en un nuevo rumbo que ha coincidido con el relevo en la dirección del centro o la introducción de departamentos como el de Nuevos proyectos. Este proceso se basa en la unificación del marco pedagógico (que todo el equipo aplique las mismas prácticas ya experimentadas en el centro: trabajo cooperativo, proyectos...); la personalización de la enseñanza con el alumno como protagonista de su proceso de aprendizaje; avanzar más en el proceso de internacionalización y en la aplicación de un modelo de calidad en la gestión del centro.

LA HÍPICA, FUTURO CLUB SOCIAL DEL CVE

El Colegio Virgen de Europa levantará un club social para padres, alumnos y antiguos alumnos en la antigua hípica de Las Lomas. El colegio compró la finca a finales del año pasado y está ya limpiando y preparando la parcela para rehabilitar las instalaciones y adecuarlas a su nuevo fin.

La hípica llevaba años a la venta, pero las limitaciones de uso de la parcela (está calificada para uso deportivo o dotacional; no admite la construcción de viviendas, por ejemplo) han dificultado su venta. Finalmente el colegio se ha hecho con la hípica para convertirlo en el club social del centro y afianzar así la construcción de una verdadera comunidad Colegio Virgen de Europa.