Firma sus obras como Ditar de Luna, pero su nombre real es Leticia Catalán. Tiene 46 años y es Ingeniera en Telecomunicaciones. Pero, como ella misma dice, tiene doble personalidad, porque también le encanta la historia y el arte. Y, por supuesto, leer, documentarse y escribir, su gran pasión.
¿De dónde viene el nombre?
En mi grupo de amigas de Madrid nos pusimos unos nombres en clave cuando éramos adolescentes, que hacían referencia a una virtud y a un defecto de cada una. De mi decían que era divertida y tardona, así que surgió Ditar. Y de Luna, me lo propusieron por la Virgen de Luna. Es un nombre que me despierta mucha energía.
¿Cuándo empezaste?
Escribo desde pequeña. Me gustaba mucho leer y tenía mucha imaginación. Cuando me pedían una redacción en el colegio era lo mejor del mundo. Con 17 años, gané un concurso del Ministerio de Cultura con un relato de ciencia-ficción. Fue un momento muy especial, pero al año siguiente entré en Teleco y no volví a escribir.
"Con 17 años gané un concurso con un relato de ciencia-ficción, pero al año siguiente entré en Teleco y no volví a escribir"
¿Y el salto a la novela?
A los 35 años, más o menos, tuve una etapa personal complicada que me hizo replantearme la vida. Me puse a pensar que cosas me hacían sentir bien y escribir, sin duda, era una de ellas. Como me gustaba la novela romántica, hice un curso y me empecé a meter en ese mundillo, a ir a eventos, conocer a escritoras...
Un año después me presenté a un concurso de relatos que organizaba el Ayuntamiento de Tarifa, y lo gané. Y así me animé a escribir mi primera novela, La Maldición de los Luján, que quedó finalista en los Premios Titania, de Ed. Urano.