Es evidente que Boadilla disfruta de una amplia y variada oferta escolar adecuada, sin excepción, a todos los bolsillos y preferencias. Así que tanto los que buscan colegio por primera vez como los que se plantean cambiar a otro tienen mucho y bueno donde escoger. Además, la legislación regional permite elegir sin mayores trabas siempre y cuando haya plazas. Con todo, y para apuntar con garantías, junto al boca a oreja de aquellos que ya conocen el centro de nuestras preferencias no está de más valorar algunas directrices:
1.- PROXIMIDAD. No todos los colegios de la zona ofrecen rutas escolares, que lógicamente, y de haberlas, habrá que presupuestar y pagar a parte. Elegir un colegio que no quede en la otra punta de nuestro lugar de residencia es, a priori, una ventaja: más pronto que tarde nos sacará y sacará a nuestros hijos de aprietos.
2.- IDIOMAS. Cada vez es más potente la presencia del inglés en la educación de los niños. En nuestra localidad hay colegios, públicos, concertados y privados, que optan desde hace tiempo por la educación bilingüe español/inglés, y otros que potencian la enseñanza de la lengua anglosajona sin llegar a equilibrarla en la educación general. Y es que no todos opinan que aprender ambas lenguas en igualdad de condiciones sea la mejor opción para la adquisición de conocimientos. Por cierto, hay colegios privados en Boadilla que también ofrecen alemán, francés e incluso el cada vez más pujante chino.
3.- VALORES. Hay centros que se caracterizan por su mayor disciplina o por una serie de valores y tradiciones, sobre todo familiares, que llevan por bandera y a termino, trabajando para preservarlas generación tras generación. En este sentido, hay que tener claro que todos los centros del municipio son, por ejemplo, mixtos. Por otra parte, debemos tener claro si queremos que nuestros hijos se eduquen en un centro católico o en uno laico. No hay un mundo que los distancie entre sí, pero formación y rutina no son iguales. Por ley, en los laicos es posible matricular a los niños en la asignatura de religión, y cada vez es más frecuente que en sus instalaciones se efectúe además la catequesis para aquellos que tengan en mente la Primera Comunión.
4.- INSTALACIONES. En términos generales, la oferta escolar boadillense en este capítulo es impecable. Pero no es igual un colegio con 40 años a sus espaldas que otro que apenas funciona desde hace una década. Y eso que los más veteranos, a menudo privados, son los que mayores espacios abiertos y campos deportivos suelen ofrecer para los muchachos. El servicio de comedor está completamente extendido, como sucede con los DUE (diplomado universitario en enfermería) y los gabinetes psicológicos y de orientación pedagógica.
5.- NECESIDADES ESPECIALES. Varios colegios públicos de la localidad cuentan con personal especializado en la integración de alumnos con trastornos de desarrollo (Ágora) o chavales que acusan problemas locomotrices (García Lorca), centro que dispone de aulas de fisioterapia.
6.- ACTIVIDADES EXTRAESCOLARES. Cada vez más importantes para padres… e hijos, por este orden o el inverso. En conjunto, la oferta es abrumadora a partir de la creciente demanda en este sentido. Idiomas, refuerzo de asignaturas, deportes de todo tipo (tenis, fútbol, baloncesto, voleibol, atletismo, gimnasia rítmica y estética, natación y waterpolo…), clases de música, baile y ajedrez, etc. Eso sí, no en todos hay de todo, por lo que no está de más averiguar si el centro en el que hemos fijado nuestras preferencias dispone de esos opcionales.
7.- AMPLIACIÓN DE HORARIOS. Un servicio matinal y vespertino no disponible en todos los colegios de la zona y que algunos echarán definitivamente en falta por motivosw profesionales o personales. Algo parecido sucede con el uniforme, uno de esos caballos de batalla que algunos padres elogian por la facilidad en la logística diaria, y que otros rechazan.
8.- ALUMNOS POR CLASE Y CICLOS EDUCATIVOS. la media suele rondar 25 chavales por aula, pero hay centros que no tienen más de 20 y otros que suben a 27 ó 28, el tope por ley. Ojo a los ciclos educativos: no en todos los centros, como en los públicos, se imparte educación infantil o ESO.
9.- PRECIOS. Sin valorar libros, material escolar, seguros, comedor y clases extraescolares, entre otros, un centro público es gratuito. Los concertados (en algunos casos de titularidad privada, en otros propiedad de cooperativas) suelen costar entre 120 y 150 euros, en concepto de donación mensual o de refuerzo de determinadas materias, hasta la Educación Secundaria Obligatoria (ESO), cuando la suma escala a 400 euros/mes. En los privados, los precios son variables, pero estimativamente no bajan de 500 euros/mes por alumno.
10.- ENTREVISTA CON LA DIRECCIÓN Una vez centrados en el colegio o los colegios (no más de dos o tres) que nos interesen, una cita con sus responsables despejará dudas y nos permitirá conocer de primera mano aspectos del día a día que pronto afectarán a los chicos.