Tenía siete años cuando hizo su primer de doblaje para una serie infantil de televisión. A sus padres, a los que animó a apuntarla al casting una compañera de trabajo de su madre, no les pareció mala idea, dado que al fin y al cabo, preocupados por su intimidad, “no se la iba a ver, sino que solo se escucharía su voz”, nos cuenta su madre, María Mota. Y la niña, claro, estaba entusiasmada.
Ángela Arellano, joven boadillense que cumple el próximo mes 15 años y estudia 4º de ESO, aprendió antes a cantar que a hablar. Desde pequeña ha tenido muy claro que quería ser actriz. Una idea sobre la que ha planificado su futuro: “Quiero estudiar el bachillerato de Artes Escénicas y, luego, Arte dramático y dirección en Londres”, nos cuenta.
En el camino recorrido hasta ahora ha ido sumando a su curriculum doblajes en películas (Tomorrow land, La ladrona de libros o, Del revés, donde ha puesto la voz de la niña Riley) y series de televisión (Trophy Wife, El asombroso mundo de Gumbal, La princesa Sofía, Mujeres desesperadas...); ha protagonizado el corto, I am her, grabado en febrero en Londres; e interpretado el personaje de Nala de 2012 a 2014 en el musical El Rey León. Actualmente, además, también la podremos ver en la obra de teatro para adolescentes Adolescer 2055, en el teatro Maravillas de Madrid (ver información adicional). Trabajos que siempre ha hecho sin abandonar sus estudios (es de las que saca buenas notas).
Nos cuenta cómo dobla con cierta facilidad, porque “no te tienes que meter tanto en la piel del personaje. Es algo que haces en el momento. Además, no son ni muchas horas ni todos los días”, lo que facilitar llevar al día los estudios.
¿Cantar o interpretar? Me gusta más interpretar.
¿Cómo fue la experiencia del musical El Rey León? Increíble. Estuvimos casi un año de ensayos antes del estreno. En las pruebas éramos unos veinte niños hasta que quedamos cuatro [normalmente en cada función un niño distinto hace el personaje. Cambia de una a otra por los límites laborales al trabajo de menores, el propio desgaste de las funciones y para que puedan trabajar y estudiar]. La función era por la tarde, hacía el primer acto y me iba –recuerda–. Y por la mañana estaba en el colegio.
En el Rey León estuvo "hasta que la niña creció", que es lo que tiene ser tan joven.
De aquella época recuerda todos los nervios de todos del primer día “antes de salir al escenario, con más de mil espectadores en la sala. Los nervios de todas formas son buenos, te mantienen alerta y despierta. Luego, cuando sales al escenario te olvidas de todo”.
Como artista, tiene un representante. “Y muy buena –apunta su madre–. Para nosotros, como padres, es muy importante su figura, saber que tu hija está en buenas manos y con alguien en quien poder confiar. Y en lo profesional también es importante: es quién está al día de los casting y los trabajos que puedan surgir y mejor se adapten a su perfil profesional.
A pesar de que a ella no le ha faltado qué hacer durante estos años, Ángela es consiente de la inestabilidad propia del mundo del espectáculo. “Puede que estudie psicología, pero lo mío, mi vocación, es ser actriz”. Sabe que el camino es duro. “Hay que saber decir que no a muchas cosas, aunque creas que son la oportunidad de tu vida... Es un mundo duro, muy vocacional”.
Es importante también recibir la formación adecuada para mejorar las habilidades propias y los puntos flojos. Así, actualmente recibe clases de interpretación en inglés en la Fundación First Team, impartidas por el actor Scott Cleverdon; y en Primera Toma Coach de interpretación con cámara.
Con sus compañeros de instituto tampoco habla mucho de lo que hace. Es una más. Una joven a la que le gusta salir con sus amigos por Boadilla, fan del grupo One direction o de la incipiente cantante estadounidense Halsey, a la que aspira poder ver algún día actuar en España.
¿Qué te gusta de Boadilla? Me gusta la tranquilidad, los parques... Y no me gusta lo poco que hay para hacer para la gente de mi edad, la verdad. No podemos ir de tiendas, por ejemplo.
A partir del 27 de septiembre la obra Adolescer 2055 se podrá ver los domingos en el Teatro Maravillas en Madrid (en la calle de Manuela Malasaña, 6), a las 17.00 horas, hasta finales de mes. Si el público acompaña, es probable que siga en cartel más allá de octubre.
La obra, dirigida a un público joven, cuenta las 48 horas en las que seis adolescentes viven un peculiar proceso de selección para ser adoptados por una familia. En clave de comedia negra, cruel. Con mucho humor.
Una obra de la Compañía de Jóvenes Actores Primera Toma escrita y dirigida por Roberto Santiago. Ángela Arellano, es una de sus protagonistas. En concreto, ella participará en las interpretaciones de los días 4 y 18 de octubre.
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