Podemos y Equo consideran que el Ayuntamiento de Boadilla no ha facilitado la participación de los vecinos en el desarrollo del Plan General de Ordenación Urbana (PGOU), porque no ha creado puntos informativos; se ha limitado a respetar los mínimos legales de información pública ofreciendo un documento extensísimo, complejo, y con muy poco tiempo para su análisis y debate en profundidad.
Por otro lado, consideran estas formaciones, el PGOU contiene datos desfasados y es llamativa la "ausencia de estudios fundamentales para el futuro desarrollo del municipio". Por ejemplo, sobre movilidad, contaminación acústica y calidad del aire.
Consideran que hay falta de previsión respecto a servicios y dotaciones sociales, unida a la propuesta de aumento del techo poblacional, que "exacerbará las carencias que ya sufre la ciudad, especialmente en los campos de movilidad, educación y sanidad".
Estos partidos creen que apenas reciben atención los atascos y no se contempla el impacto del aumento de población. Tampoco la necesaria adaptación de la recogida de residuos a la normativa europea para el año 2020. En conjunto, consideran que el nuevo PGOU "supone una pérdida de calidad de vida y una mayor huella ecológica".
Por ello, apuestan por una mayor participación, realizar los estudios pertinentes para que los planes se ajusten a la realidad, corregir los desequilibrios en educación y sanidad que competen al Ayuntamiento, cumplir con la normativa europea, eliminar el aumento en el número de viviendas no comprometidas mientras no sea posible garantizar su sostenibilidad y adecuar la vivienda pública a las necesidades sociales con especial atención a jóvenes y personas con riesgo de exclusión o necesidades especiales.