La Sala de Arte Santander, en pleno corazón de la Ciudad financiera, en Boadilla, es un lujo de museo, que no muchos conocen y que es posible visitar gratuitamente. No nos equivocamos al decir que se trata de una de las colecciones privadas más importantes de nuestro país, tanto por la calidad de las obras como por su número. Todo ello en un espacio expositivo que nada tiene que envidiar a los grandes museos y que, si bien no se encuentra en el eje madrileño del Prado-Recoletos, cuenta con un entorno natural y arquitectónico notable. Y está, como hemos dicho, en Boadilla del Monte.
La sala, construida ex profeso para acoger la Colección Banco Santander, la forman generosos espacios que suman unos 3.000 metros cuadrados y que permiten disfrutar aún mejor de la contemplación de las más de 200 obras expuestas de las casi 1.200 que integran la colección del banco.
Una colección de coleccionesAlgunas fueron adquiridas en compras y subastas, si bien es cierto que la mayor parte procede de las colecciones de entidades extintas como el Banco Hispano Americano, el Banco Central, Banesto y, sobre todo, el Banco de Urquijo, principal germen de la actual colección. Ana Botín, presidenta del Santander, ha calificado perfectamente el conjunto artístico como una “colección de colecciones”, y razón no le falta.