La obra responde al estado en el que se encontraba el anterior, que era de hormigón poroso (comunmente llamado tennisquick), con falta de material en algunas zonas y algún desnivel en parte del suelo, provocado por el temporal Filomena.
El nuevo pavimento es de resina, con una estética y color renovados. También se han reparado los vallados perimetrales de las pistas.
El coste de la actuación ha ascendido a 185.931,39 euros.