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Carlos Pastor: “La música de calidad es la que perdura”

Carlos Pastor (63) es compositor, toca el piano, la guitarra y el bajo. Ademas, es profesor de música en un colegio público. Vecino de Boadilla desde hace 37 años, acaba de publicar el libro ‘Cien discos inolvidables’ (Ed. Ruser), una recopilación de lo mejor de la música del siglo XX.

 

En los años 80 fundó Clap, una de las primeras bandas españolas en hacer fusión. Y dio vida al grupo de poprock La Luna (después conocido como Asuntos de Familia) junto a su hermano, Adolfo.

Siempre rodeado por nombres míticos como Fernando Sánchez (Obús), Guny (Asfalto) o Lorenzo Azcona (Manolo Tena), Carlos Pastor ha creado varias grupos homenaje a bandas legendarias del rock sinfónico como Harold & The Barrels (homenaje a Genesis), La Ruta de la Seda (Camel) y Karmesí (King Crimson).

Con la primera, Harold & The Barrels, tuvieron mucho éxito y grabaron un disco. Gracias a él vivieron una anécdota que todavía recuerda con emoción. “Al baterista del grupo se le ocurrió la idea de mandárselo a Phill Collins con un sencillo mensaje: ‘Esperamos que te haga sonreír’. La sorpresa fue que no solo nos contestó sino  que nos incluyeron en su página web como grupo homenaje oficial de Genesis en España”.

Para Carlos, la música ha sido la banda sonora de los acontecimientos sociales más relevantes de la segunda mitad del siglo XX. Una época que dio grandes grupos y músicos, cuyos temas nos siguen emocionando.

Su último proyecto sobre el escenario es Rock Confónico, una banda con la que lleva ya siete años y que reúne a los mejores músicos del rock español. Su repertorio incluye temas de grupos legendarios como Yes, Genesis, Jethro Tull, Pink Floyd o Emerson, Lake & Palmer.

También profesor…

Su pasión por la música se ha expandido también al mundo de la docencia. Muy consciente de la importancia de incluir las artes en la educación, preparó un programa para enseñar piano en Primaria. Tuvo tan buena acogida, que lleva impartiéndolo desde hace 20 años en el CEBIP Francisco Quevedo de Majadahonda, donde actualmente es jefe de estudios. Es un profesor orgulloso de sus alumnos, algunos de los cuales han terminado tocando en el Teatro Real.

… y escritor

Pero su espíritu creativo no acaba ahí. El pasado mes de diciembre presentó su libro Cien discos inolvidables (Ed. Ruser). Un recorrido por lo mejor de la música del siglo XX donde encontrar no solo detalles sobre los grupos y las canciones, sino un sinfín de anécdotas que lo convierten en un texto muy personal.

Carlos, ¿cómo nació el libro? Realmente lo escribí hace 25 años. Para mí fue una terapia, no pensaba publicarlo. Fue un momento durísimo, de mucho dolor por la muerte de mi hermano. Necesitaba refugiarme en algo y me puse a escribir sobre los discos que escuchábamos y comentábamos juntos.

¿Y por qué publicarlo ahora? Porque ahora me ha parecido un libro necesario. Me dedico a la docencia y veo el despiste artístico que tiene la gente más joven. Me gustaría dejárselo como una referencia, una guía para que descubran todo lo que se ha hecho en la música, que lo bueno perdura para siempre, y que hay mucho más allá del reguetón.

Y para las personas de más edad, que sí conocen esta música, creo que van a recordar esa época con satisfacción y les dará la oportunidad de redescubrir esos temas.

De todos modos, el día que hicimos la presentación nos reíamos porque le decía al editor que publicar un libro sobre discos en una época en la que no existen los discos es como hacer un libro de arqueología [ríe].

¿Cómo los has elegido? Es muy difícil ponerse de acuerdo sobre los 100 mejores discos de la historia. De los que yo hablo no están seleccionados de una lista. Me interesaba elegir aquellos que a mí me habían tocado la fibra. Es un libro escrito desde la piel. En algunos capítulos hay consideraciones técnicas, pero en otros son experiencias de todo tipo que nos han sucedido en los conciertos.

¿Cuántos discos tienes? Mi colección no es muy grande. Ahora mismo tengo cerca de 1.000 vinilos. De hecho, todas las imágenes que aparecen en el libro son fotografías de mis discos.

¿El vinilo se escucha mejor?

¡Claro! Aunque es un soporte que se estropea con facilidad, la música te llega de otra manera, a una frecuencia más grande, se nota en el estómago. Es como cuando escuchas algo en el estudio, es otra cosa.   

¿Proyectos a la vista? Me queda un año para jubilarme de la docencia. Después quiero dedicarme a componer, que es lo que más me gusta en la vida. Quizás escribir… Tengo un anecdotario inmenso de historias que me han pasado en los escenarios. Pero sobre todo quiero tener tiempo para disfrutar, para hacer lo que me apetece sin prisas.

 

Cien discos inolvodables (Ed. Ruser)

Web: https://www.rockconfonico.es/

Facebook: Rock Confónico