El fin de una era. Los tradicionales metrobuses y billetes sencillos para viajar en el metro o autobús dejaron de venderse el pasado 31 de octubre. La Tarjeta Multi, que se lanzo en julio de este año, es su sustituto. Un nuevo dispositivo que no requiere contacto y es reutilizable.
Con esta medida, la Comunidad de Madrid calcula que se ahorrará más de 25 toneladas de papel al año, lo que supone un apoyo importante a la sostenibilidad medioambiental.
La Tarjeta Multi tiene un precio de 2,5 euros (hasta el pasado 14 de octubre se ha facilitado de forma gratuita) y se puede adquirir en las estaciones de metro y estancos.
Al igual que en el caso de los metrobuses, la nueva tarjeta sin contacto podrá ser utilizada por más de una persona. Cuenta, además, con una garantía de dos años si los desperfectos que se generen no son debidos a un mal uso de la tarjeta por parte del viajero. En este caso el usuario tiene derecho a la sustitución de la misma sin coste alguno.
La tarjeta sirve tanto para el Metro como para los autobuses de la Empresa Municipal de Transporte (EMT) aunque Metrobus y tarjetas convivirán hasta final de año (falta por adaptar los vehículos de la EMT al nuevo medio de pago). También se podrá usar para circular en BiciMad, el sistema municipal de bicicletas públicas, aunque para ello hay que darse de alta en Bicimad y pagar la cuota anual.
¿Cómo funciona?
La Tarjeta Multi se puede recargar de billetes en cualquier máquina expendedora de toda la red de Metro y Metro Ligero, así como en estancos, puntos autorizados y cajeros de Bankia.
El uso de la tarjeta en los distintos transportes no tiene misterio. Es una tarjeta sin contacto. Así que simplemente habrá que acercarla a los sensores de los tornos antes de entrar y listo.
¿Qué pasa con los billete de papel ya comprados? Se podrán podrán seguir utilizando hasta finales de este año.